Música: Francisco Alonso. Letra: Martinillo
Intérprete: Salud Ruiz
Rosarillo era moza juncal, sus ojazos le rociaban luz
cordobesa, mujer sin igual, en el campo resueño andaluz.
Ni un mocito logró su querer, a toítos llegó a despreciar
y, al mirarla, entre casas un día la gente decía toíta al compás
al verla pasar:
Rosarillo, Rosarillo la mocita con más salero
a ningún mocito quiere porque quiere a un bandolero
Los civiles tiraban a dar, una bala Rosario rozó;
Tempranillo saltando frugal con su cuerpo a su hembra
tapó y la libró;
pero pronto se vio acorralao, un disparo en el pecho lo hirio
y en aquella terrible agonía, perdiendo la vida, un beso la dio
y asi murmuró:
Rosarillo, Rosarillo, la mocita tiene fuego
que si muero Tempranillo el famoso bandolero.