Noche loca (1927)
Género: Revista moderna en dos actos.
Texto: Joaquín Vela y José López Campúa.
Musica: Fancisco Alonso.
Estreno: 5 de octubre de 1927, en el Teatro Romea de Madrid.
Intérpretes del estreno: Concha Constanzo (Primera vedette), Concha Rey (Segunda vedette), Victoria Pinillos, Laura Pinillos, Manolo Tito, Arsenio Becerra, Alady, Lepe, Ofelia Cortesina. Bailarines: Antoñita Torres, Manolo Tito, Arsenio Becerra, Lo Davies. Director de orquesta: Emilio Torres. Director de escena: Salvador Videgain. Escenografía: Álvaro Retana.
Sinopsis: los protagonistas de la historia son cuatro, Niceto, dueño de una imprenta, Visita, la hija de éste, Fausto, empleado del primero y pretendiente de la segunda y por fin, Aniceto, un escritor muerto de hambre que convence a Niceto de que le edite un libro de cuentos. Los tres primeros desconocen que todas las historias son un plagio. Así, cada uno de los cuentos tiene una trama propia. Hay un cuento de un harén, con un príncipe cantando un fox-trot; Frutas tropicales a ritmo de one-step o un paje de Bocaccio que nos advierte de los males del matrimonio.
En el segundo acto siguen los maravillosos disparates, que en mano del maravilloso Álvaro Retana como escenógrafo y figurinista debieron ser delirantes a la par de elegantes. Las mujeres del corazón tenía uno enorme, sangrante y rojo en medio del escenario del que salían las bailarinas. La escena de «Se necesita una mecanógrafa… fea» se hizo tan famosa que, hasta después de la muerte del maestro, se siguió programando. Retana hizo una enorme máquina de escribir donde bailaban por sus letras las bailarinas. La obra termina cuando tiempo después descubren el engaño, al menos Fausto se ha hecho rico trabajando en otra imprenta y pide la mano de Visita a Niceto, y con ese momento de felicidad deciden todos bajar el telón bailando un charlestón.
La obra superó el centenar de representaciones entre el Romea y el Maravillas. El libreto anota esta curiosidad: «Por tratarse de una revista moderna, en fechas sucesivas se añadirán nuevos cuadros, hablados y musicales que, naturalmente, no figuran en el presente ejemplar». De hecho, se llegaron a los 19.
La música del popular compositor granadino, incluía un tango, un bolero, un pasodoble, una java, una «marcha guerrera», una machicha gaucha», el «vals de la rosa» y el «fox de los espejos».
